“Nos encontramos en un punto de inflexión tecnológico y el cloud será la plataforma que marcará las pautas a partir de ahora”

Entrevista a Jordi Torres, autor del libro “Empresas en la nube. Ventajas y retos del cloud computing”.

Profesor, investigador y escritor en nuevas tecnologías TIC. Jordi Torres es catedrático en la UPC Barcelona Tech y cuenta con más de veinte años de experiencia en I+D con un centenar de publicaciones científicas dentro del área. También dirige un grupo de investigación en el Barcelona Supercomputing Center realizando proyectos, tanto con pymes como con empresas multinacionales líderes del sector tecnológico. Acaba de publicar su primer libro divulgativo “Empresas en la nube. Ventajas y retos del cloud computing”.

¿Qué podemos encontrar en su libro “Empresas en la nube, ventajas y retos del cloud computing”?
Con este ensayo he puesto el punto de mira en un tema del cual se habla a menudo, pero del que mucha gente no acaba de tenerlo claro. A través de apartados “Internet está cambiando la sociedad”, Internet hoy”, “Oportunidades para las empresas”, “Retos que aparecen”, “La sostenibilidad de la nube”, o “El futuro”, en el libro se persigue dar respuestas y aclarar dudas. En definitiva, un intento de ayudar a entrar fácilmente en la nube a quien lo desee.

¿A quién va dirigido el libro?
El libro, con propósito divulgativo, quiere ser una ayuda para empezar a caminar en la nube a aquellas personas y empresas que no conocen este nuevo paradigma de computación, pero que tanto ellos o sus empresas creen que vale la pena intentar explorarla. Trata de acercar al lector las claves para entender los cambios que están transformando el escenario TIC, pensando en personas interesadas en aspectos informáticos y empresariales generales.

¿Qué ventajas aporta a las empresas en cuanto a estas novedades en TIC?
El libro puede ser muy útil para quien quiera encontrar una descripción sencilla y rigurosa de las posibilidades del cloud computing, de sus ventajas y también de sus peligros. Nos gustaría que con su lectura se pueda llegar a una visión global que permita comprender cómo puede afectar a nuestra empresa y poder empezar a plantearnos cómo podemos avanzar en esta nueva realidad tecnológica.

¿Cuáles cree que son los beneficios actualmente del cloud en las organizaciones?
De manera resumida podríamos decir que la principal ventaja para un número importante de empresas es que en este nuevo paradigma se paga por lo que se gasta, convirtiendo a las TIC como un servicio más, como el agua o la electricidad. Esto afecta claramente a las inversiones, a veces difíciles de dimensionar y de financiar. También es muy importante la agilidad que ofrece este nuevo servicio para obtener nuevos recursos hardware o software frente al tiempo que requiere crear una instalación informática propia.

Pero no todo serán ventajas… ¿Le ve algún contra o desventaja?
En el momento de esta entrevista estamos viendo como Blackberry ha dejado varias veces esta semana a millones de clientes sin servicio de correo, mensajería o navegación. Pero a los riesgos de falta de servicio también hoy en día a las empresas les preocupa la privacidad y seguridad de sus datos. Sin duda, estos son los temas en los que el cloud debe mejorar muchísimo. Por ello, de momento lo que está claro es que habrá los clouds privados en las empresas que se lo puedan permitir. Serán clouds gestionados por las propias empresas en las que mantendrán parte de su información y, que de manera automática, se coordinarán con los diferentes clouds públicos.

Esta tecnología avanza a pasos agigantados, ¿Cómo ve el cloud en unos cinco o diez años? ¿Cree que todas o una gran mayoría de las empresas lo utilizarán?
Considero que nos encontramos en un punto de inflexión tecnológico y el cloud será la plataforma que marcará las pautas a partir de ahora. Para las empresas se hace difícil decidir ahora si subirse al cloud o no; lo entiendo. De hecho, el momento actual se puede comparar con los primeros años de la aparición, hace ya unas tres décadas, de los PCs. Entonces, los ordenadores tenían pocos años de vida y estaban empezando a implantarse en las organizaciones y compañías sustituyendo a las máquinas de escribir, marcando un cambio profundo en la manera de cómo los trabajadores guardaban y se pasaban la información. Se preguntaban ¿Estará segura la información? ¿Dónde se guarda? ¿Alguien la podrá ver? En aquel momento, las empresas se vieron obligadas a analizar la situación de la tecnología y a tomar una decisión sobre en qué dirección se movían y, obviamente, algunos acertaron y otros no. Pero muchos de los que se quedaron quietos y no se pararon ni a pensar en ello, perdieron.

¿Cuál es su labor en el grupo de investigación en el Barcelona Supercomputing Center?
Sin duda, son un grupo de gente brillante y representa un lujo para mi poder trabajar con ellos en un centro de referencia mundial como es el Barcelona Supercomputing Center. Entre todos estamos intentando avanzar al estado actual de la tecnología y mantener una investigación de primer nivel con alianzas estratégicas con otros grupos o empresas a nivel mundial. Nuestro objetivo de grupo actualmente es lograr un mayor y más sostenible aprovechamiento de los recursos TIC en el escenario del cloud computing.

¿Está pensando en escribir otros libro sobre cloud, cómo irá enfocado?
La verdad es que la experiencia de escribir un libro ha sido muy gratificante, ¡un regalo! A raíz del libro estoy identificando temas que interesan o pueden ser útiles a nuestra sociedad y en los que yo creo que puedo aportar.  Por ejemplo, ¿Y después del cloud, qué? o ¿Qué actitud debemos tomar ante estos cambios? Sin duda intentaré aportar mi granito de arena para responder estas preguntas u otras que vayan apareciendo, con artículos divulgativos y conferencias, pero ciertamente no descarto volver a las andadas con un libro más adelante.

¿Qué otros retos futuros se marca?
Ahora que he descubierto esta faceta de divulgador de las TIC me gustaría continuarla, creo que es otra manera de contribuir a hacer de este mundo un lugar mejor para vivir, en este caso a través de las TIC. Mi reto ahora es compatibilizar esta nueva actividad con mi trabajo habitual de profesor e investigador que, sin duda, también me apasionan. Ahora mismo, sinceramente, aunque estoy disfrutando muchísimo, podríamos decir que voy un poco desbordado.  Mi reto, aunque pueda parecer pequeño desde fuera, es encontrar la manera de alinear este nuevo rol con los anteriores para poder seguir con todos los frentes y encontrar el punto de equilibrio personal y profesional necesarios para avanzar.